Una experiencia tranquila en Quarteira

Desperté con el sonido de las olas y disfruté de la limpieza impecable de mi habitación. El servicio en el restaurante fue excepcional, siempre atento a las necesidades de los huéspedes.

La piscina estaba demasiado fría para un buen baño. Además, el ruido de la calle en algunas noches interrumpió mi descanso.

Fue un lugar ideal para unas breves vacaciones en Quarteira con una buena calidad por el dinero pagado. La presión de la ducha estaba increíble, lo mejor después de un día de sol. Si buscas tranquilidad, pide una habitación lejos de la piscina.

el personal fue increíblemente amable y servicial. la insonorización de las habitaciones es deficiente.

Las instalaciones del hotel son muy

cómodas y están bien cuidadas. La piscina es un gran lugar para relajarse, aunque el servicio en el bar puede ser un poco lento. El desayuno es bastante variado, pero cenar allí no me pareció tan bueno. El personal es excelente y siempre dispuesto a ayudar.

El personal fue increíblemente amable y servicial durante mi estancia. La piscina estaba bien cuidada y era un lugar perfecto para relajarse después de un día explorando la ciudad. Además, la limpieza diaria de la habitación fue impecable, lo que hizo que me sintiera muy cómodo.

Una noche hubo un poco de ruido de la calle que interrumpió mi descanso.

Lindo lugar para disfrutar de unas vacaciones tranquilas, piscina cuidada y personal muy amable que está siempre dispuesto a ayudar. Las habitaciones son amplias y limpias, ideal para descansar después de recorrer. Un poco alejado de la playa, pero con shuttle que facilita la llegada.

Buena atención y piscina genial

Pasamos 4 noches y la verdad que el personal fue muy amable, siempre dispuesto a ayudar. La piscina es grande y perfecta para relajarse. Nos gustó mucho el bar al lado de la piscina donde podías pedir snacks rápidos. Un pequeño inconveniente fue que a veces la música estaba un poco alta, lo que hacía difícil relajarse. En general, muy bien.

Este lugar me queda perfecto y ofrece todo lo que necesito, wifi, bar/lounge, piscina al aire libre y 24 horas de recepción. Recuerdo que en mi primera estancia el personal me ayudó devolviéndome mis auriculares olvidados. Recomiendo disfrutar de la piscina y su atención. ¡Regreso para unas vacaciones!

El personal es excepcionalmente amable y siempre dispuesto a ayudar, lo cual hace que la estancia sea más agradable. Las instalaciones comunes, como la piscina, están muy bien cuidadas y limpias. Sin embargo, la insonorización deja mucho que desear, ya que se escuchaban ruidos de otras habitaciones y áreas comunes. Además, las camas no son muy cómodas, lo que puede dificultar el descanso hasta cierto punto. El desayuno es bastante repetitivo y podría ser más variado.

el entorno natural es impresionante

hermosos jardines, transporte gratuito

piscina fría

La presión de la ducha genera una experiencia de lavado bastante agradable, casi refrescante. Las habitaciones son sencillas pero limpias, lo que es un punto positivo para mantener una buena higiene durante la estancia.

todo suena hueco y es extremadamente ruidoso. Disfrutar del sueño se vuelve complicado ya que cada pequeño ruido se magnifica. Además, la cama es muy incómoda, y en caso de lluvia, la luz de emergencia se activa inesperadamente, lo que arruina aún más la noche. El desayuno carece de variedad en dulces, y la alcachofa de la ducha estaba medio rota, lo que podría frustrar a muchos que buscan un buen comienzo del día.

La habitación doble era bastante pequeña, con camas pequeñas que ni siquiera se unían bien. El colchón era fino y las almohadas diminutas, incómodas en general. Al entrar, hacía un frío increíble, y no logramos calentarla aunque subimos la calefacción. Además, se escuchaban ruidos de otras habitaciones, lo cual no ayudó a descansar. La televisión parecía sacada de otra época. No era lo que esperábamos.

Las habitaciones son limpias y el personal siempre dispuesto a ayudar. El desayuno no es excepcional.

Las instalaciones comunes son impecables y la piscina es un sueño. El personal es un encanto y las toallas son reemplazadas diariamente, ¡me siento como una reina!

La decoración de las habitaciones parece haber quedado atrapada en la década de los 80, ¡un viaje en el tiempo, pero no de los buenos!